Gracias a las potentes inversiones llevadas a cabo en los últimos años, el fondo de inversiones Hispania se ha convertido en el principal g...
Gracias a las potentes inversiones llevadas a cabo en los últimos años, el fondo de inversiones Hispania se ha convertido en el principal grupo hotelero español. Ha superado en establecimientos y habitaciones a compañía tradicionales del sector como Meliá, H10 Hoteles y Hoteles globales. En plena fase de expansión, impulsada a finales del año pasado con la compra de la cadena Alua –se hizo de golpe con siete 'resorts' en Canarias y Baleares por 165 millones de euros–, ha puesto el ojo en Bilbao. Justo una semana después de que otro destacado fondo, el madrileño Grupo Millenium, anunciara su intención de convertir en hotel de lujo la sede del Banco Santander en la Gran Vía, la Plaza Circular recoge el testigo con la transformación de uno de los edificios más emblemáticos de la capital vizcaína: el del café La Granja.
El establecimiento hostelero, que echó a andar el 31 de julio de julio de 1926 y pasó hace dos años a manos de la inmobiliaria Navarra Fitbox, permanece cerrado desde el 8 de febrero de 2017, cuando, de forma inesperada, bajó la persiana de la noche a la mañana. La aseguradora Helvetia vendió el inmueble por casi 7,5 millones de euros. Tras 90 años de ininterrumpida actividad, el histórico café solo ha reabierto las puertas desde entonces de forma esporádica para acoger la celebración de eventos puntuales de carácter cultural, como ferias de libros. Los despachos de oficinas y compañías de seguros repartidas por la cinco plantas superiores comenzaron a ser desalojados a partir de 2010. La Granja seguirá el mismo camino que el local del número 4 de la Gran Vía, situado a menos de 50 metros, pero con una particularidad: los 325 metros cuadrados de la planta baja, ocupada por el café que regentó el Grupo Iruña de la familia Garmendia, se reservarán para usos comerciales, aún por concretar.
Hispania reforzará la oferta hotelera de Bilbao, que vive un auténtico frenesí, con la apertura de siete nuevos locales a medio plazo. El fondo llevaba tiempo planificando su desembarco en la villa, pero sus planes pasaron en todo momento por la elección de esta zona en ebullición, que dibujará un nuevo Bilbao con el desembarco del gigante de moda Primark y la puesta en marcha del centro de emprendimiento internacional de la Diputación en la antigua torre del BBVA, vendida hace dos semanas por 100 millones. La llegada del AVE y el fuerte posicionamiento comercial han revalorizado de forma notoria esta área. Al igual que las obras que se llevarán en cabo en la antigua sede del Santander, la transformación de La Granja deberá recabar el visto bueno de la Comisión de Patrimonio del Ayuntamiento, que no ha valorado todavía el proyecto, por tratarse de un edificio artístico. Posiblemente lo haga en el transcurso de este mes.
Fuerte protección histórica
Levantado a finales del siglo XIX y sometido a una profunda reforma en 2008, las dependencias, con estructura de madera, disponen de un nivel de protección C. Esta categoría obliga a mantener intacta la fachada y a respetar la mayoría de los compartimentos. De hecho, varias firmas de comida rápida, además de Inditex y la cadena Cortefiel, tantearon la posibilidad de abrir nuevos negocios, pero desistieron finalmente por los importantes condicionantes que planteaba la rehabilitación del inmueble.
Responsables del área de Obras, Servicios y Rehabilitación Urbana confirmaron este martes a este periódico que la aprobación del proyecto queda a expensas del dictamen de Patrimonio. «Puede que igual haya que modificar algún punto o no. Ya se verá», insistieron fuentes de la concejalía dirigida por Asier Abaunza. Sin embargo, los promotores de este nuevo hotel están convencidos de que las obras de reforma, «condicionadas a todo lo que nos diga el diga el Ayuntamiento», podrían arrancar a lo largo del próximo año.
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